POLTERGEIST (Juegos diabólicos)

Director: Tobe Hopper

Productor: Steven Spielberg y Frank Marshall

Reparto: Heather O’Rourke, JoBeth Williams, Beatrice Straight, Dominique Dunne y Zelda Rubistein

Calificación: 4

Poltergeist, o juegos diabólicos, es tal vez uno de los clásicos del cine de terror más conocidos de todos. Estrenada en 1982, obtuvo un gran éxito en taquilla, lo que permitió que se realizaran dos entregas más. La película gira en torno a la casa de una familia, en la cual empiezan a suceder cosas extrañas que nadie parece poder explicar. La hija menor de la pareja, Carol Ann, parece tener alguna habilidad que le permite, a través del televisor, escuchar a los espíritus que perturban la casa.

Es probable que para nuestros días los efectos usados en la película no logren sorprendernos demasiado, pero en los años ochenta estos efectos sorprendieron a las audiencias y llenaron de terror y gritos las salas en las que se proyectaba la cinta. Poltergeist fue nominada a  tres premios Oscar, incluyendo mejores efectos visuales. Gracias a la academia y a otros premios y nominaciones, Poltergeist logra catalogarse como una película de terror que pasaría a la historia, ya que pocas películas de este género logran un espacio en la celebración de los premios de la academia.  

Parte de la popularidad de la cinta se le atribuye a los extraños sucesos que se dieron justo después del rodaje de la tercera parte de la saga.  En 1988, con tan solo doce años de edad, la joven protagonista de la cinta murió a causa de un paro cardiaco, un paro séptico y, posteriormente, una obstrucción intestinal. Esta fue una de las noticias más tristes de ese año, pero con ella se dio inicio al mito de “la cinta embrujada”. Con la muerte de otros tres actores del elenco: Dominique Dunne, fue asesinada por su compañero sentimental, Julian Beck; quien murió de cáncer de estomago en 1985, y Will Sampson, a causa de complicaciones en un trasplante de corazón, el mito se extendía y cada vez más y más.

De esta película cabe resaltar muchos elementos, para empezar las actuaciones de Heather O’Rourke (Carol Anne Freelings), JoBeth Williams (Diane Freelings) y Zelda Rubistein (médium), cada una en su papel descresto al público y por varios años fueron reconocidas por el papel que desempeñaron. Por otro lado tenemos de productor y guionista a Steven Spilberg que, en compañía del director, lograron impactar con la historia, la cual no se ve opacada por los asombrosos efectos especiales usados.

La manera en que transcurre la historia empezando de manera lenta mientras se introducen los personajes y situaciones, pero una vez inicia la trama el público no puede quitarle los ojos de encima a la pantalla. Después de la primera mitad de la película empieza un lapso en el cual todo parece estar volviendo a la normalidad pero con un drástico punto de giro la historia logra recuperar su fuerza y logra llevar al espectador a un estado de incertidumbre mayor que en la primera mitad de película, pues las situaciones paranormales se tornan cada vez más tensas.

Poltergeist es una cinta llena de misterio y suspenso, incluso al final quedan muchos cabos sueltos en cuanto a lo que realmente sucedió en la casa y la causa de estas anormalidades. Es definitivamente un clásico del terror que nadie se puede perder, aunque si la idea es asustarse esta película no es la indicada. Una historia intrigante que involucra a cada uno de los personajes desde diferentes puntos y resalta, en cada uno, cómo se vive la experiencia.

Es también una película de gran influencia en el cine de terror actual pues en ella se evidencian varias situaciones, contextos y corrientes que son predominantes hoy en día. Nos da un leve indicio del porqué están estructuradas  de determinada manera las películas pertenecientes a este género. Pero más allá de todo es una muy buena película que marco la historia del cine de terror y del desarrollo de los efectos especiales en Hollywood, y que es indispensable para cualquier cinéfilo haberla visto, se puede llegar a conclusiones bastante interesantes con respecto a las temáticas tratadas en ella.

Nama Black.